Capítulo.-36
Los efectos del napalm
Dos meses he estado con Patrocinio de acompañante en sus viajes de negocios, ha firmado varios contratos con mataderos de cerdos en Guijuelo, otros en Montánchez y uno en Jabugo.
Hoy cuando hemos llegado al encinar he comprobado
las grandes reformas que Don Zacarías ha ordenado hacer, el perico jardinero ha
recortado los setos que alrededor de la casona solariega hay, de tal forma han
quedado que ahora tienen el aspecto que de verdad se merecen.
En las encinas aparecen clavadas las tablas que en
su día Don Zacarías le ordenó rotular.
Se ha habilitado una sala de lecturas en uno de los
anexos de la casona totalmente equipada, de tal forma ha quedado, que más
parece una sala de conferencias.
La ganadería ha aumentado de forma considerable, una
tercera parte de las cerdas ibéricas han parido, siendo la media de seis
cochinillos por cada una de las que han parido. Las ovejas otro tanto en cuanto
a partos, no así en la media, un par de ellas han tenido dos corderos, el resto
de ellas uno.
Ha ordenado que se abandone el refugio de La Casa
con Tos y todos, sin excepción, viven ahora en la espaciosa casa.
![]() |
Estado en que quedó el árbol una vez que Don Patrocinio hizo una micción.. |
Don Zacarías ha suspendido de forma tajante y
definitiva el requesón a los porqueros psicólogos sin dar ni una sola
explicación.
Lo único que hay que lamentar es otro de los
desaguisados que Patrocinio tiene a menudo, al llegar del viaje venía con tal
apretura de hacer sus necesidades que las hizo en el recinto habilitado en uno
de los laterales, recinto que es común para todos los residentes en la casona y
del que están excluidos los humanos y Patrocinio, este de una forma rotunda,
pues no debemos olvidar, que Patrocinio un día sí y otro también, engulle, que
no come, un rollo de alambre de espino de acero y como ya quedó reseñado
en su momento mea napalm y en su descuido al hacerlo en el recinto, un
árbol que en él hay, lo ha secado de tal forma que habrá que reponerlo a la
mayor brevedad posible, hoy ha herido de esta forma el orgullo de Lázaro
Chocolatero, a quien ha pedido perdón inmediatamente por la insensatez que ha
cometido.
Os dejo una foto del estado en que quedó el árbol
después de que Patrocinio pasara por allí a hacer sus necesidades y que a
Don Zacarías le faltó tiempo para tomarla y añadirla a su ya extenso
álbum.
Hoy y debido al cansancio que traemos de tantos días
de viaje no leeremos nada de la carpeta que Don Zacarías encontró.
No hay comentarios:
Publicar un comentario